¿Se acuerdan
que hace más de un año dijimos que el culebrón del verano era el mal de amores
de Rosa y Amador? Pues eso, ha pasado más de un año y seguimos igual.
Ora se pelean,
ora se separan, ora sale alguna nueva putada (normalmente de Amador), ora
nuestra choni favorita pilla un rebote, ora lo van a intentar de nuevo, ora…En
fin, que llevamos con el disco rayado ya bastante y la cosa comienza a oler.
Que no digo yo
que separarse sea algo fácil que se deba de hacer en una tarde porque se ha
pillado un rebote, pero una cosa es eso y otra es estar dieciocho meses
deshojando la margarita. Y claro, el chicle ya lo estaban estirando un tanto.
Se necesitaba nuevo zumo porque la cosa no daba más de sí y vaya si lo han
conseguido. En botellas de 5 litros.
El amigo
Amador metió en casa a una cabaretera con todo el término que eso supone tal y
como lo utilizaban nuestras abuelas. Una tal Raquel Moragues, famosa por
intentar cazar en el pasado a otros famosos con líos varios y que será objeto
de futuros posts porque a mí personalmente
me parece un personaje fascinante.
Y ahora vamos
a coger la máquina del tiempo y nos vamos a ir a la época de la transición. ¿Se
acuerdan de esas películas del dúo Pájares- Esteso donde ambos estaban salidos
y perseguían mujeres ligeritas de ropa por doquier? ¿Les suena la cara de
Alfredo Landa persiguiendo suecas en benidorn? ¿Han visto cómo Jose Luis López
Vázquez no paraba de tartamudear al ver cacha de mujer? ¿Qué piensan al oir
frases del tipo “nena, tú vales mucho, te voy a producir un show”? Pues cojamos
todo eso, mezclémoslo en una coctelera y en vez de imaginar a los Ozores
pongamos el rostro de Amador. Por estética y temática estamos en los 70, pero
claro, en verdad estamos en la era digital y en vez de una peli tenemos 1.500
fotografías porque dado que no hay que pagar carrete ni revelado más vale que
sobre que no que falte.

Cutre como
ello sólo y sin ninguna credibilidad. Hasta aquí hemos llegado.
Lo lamento,
pero no me creo una mierda. Han abusado demasiado del tema y huele más que el
pescado del mercado el domingo. Esto atufa a montaje de los tres por los cuatro
costados. Que esta pareja ha vivido por encima de sus posibilidades y hay que
hacer lo que sea para seguir cobrando, que son muchas cosas que mantener.
Primer tufo;
llevas 18 meses diciendo que no estás con tu pareja y luego pegas un rebote
porque ésta echa una cana al aire una tarde tonta en la que es muy hermoso no
querer ni sentir. Como diría Sherlock Holmes, ilógico. Segundo tufo; en el
mundo de la farándula se conocen más o menos todos. No me jodas que Amador no
iba a saber que esta señora (que, por cierto, se conserva bastante bien para
superar los 50) tiene un historial de trepa de aquí a Lima. Si solo tienes que
poner en google su nombre. Tercer tufo; esto no lo he entendido mucho, pero
parece ser que se la presentó un friki noventero llamado LA MOMIA o algo así,
famoso por hacer montajes mil y andar en trapicheos varios. O sea; es como si
alguien que tiene fama de camello te regala caramelos y tú vas y los coges, con
tus cincuenta y largos. Cuarto tufo; te dejas hacer fotos en la terraza de tu
casa estando la tía en tanga, dejas que una desconocida campe por los siete
mares de tu rincón sabiendo que eres alguien al que persiguen fotógrafos mil.
Como diría de nuevo Sherlock, ilógico e incoherente. Y esto sin pensar
demasiado.

Se nota que
Amador se ha quedado desfasado como productor, porque como hemos dicho esto es
puro setenta. Pero oye, hay que reconocer que funciona. Quizás porque, como
diría Chespir, sólo hay unos pocos temas a los que siempre se vuelve sean los
tiempos que sean, quizás porque estamos en una era vintage, quizás porque al
fin y al cabo las españoladas molan, hay que reconocer que llevan una semana a
todo trapo con el tema y lo que rondaré, morena.
Sin embargo, a
mí hay una cosa que me llama especialmente la atención de todo este show. Que
sea la revista HOLA!, antaño revista de línea fina dedicada a princesas, nobles
y grandes de España la que haya destapado todo el pastel. Signo de los tiempos,
supongo, que incluso una revista con tanto glamour tenga que transigir y tirar
de películas de los Ozores para subsistir. Porque las fotos son cutres como
ellas solas. Yo no puedo evitar acordarme de las que salieron de Roldán, el
famoso ex director-desfalcador de la guardia civil, en calzoncillos y rodeado
de putas.
Bueno, a ver
cómo evoluciona el tema. Yo estaré pendiente porque reconozco que estoy
enganchado. Pero lo veo como eso, como un vodebil sin gracia y un tanto chusco,
una españolada cutre que nos hace reir. Que vienen las suecas, pero ahora son de Valencia.
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